lunes, 31 de agosto de 2009

CARTA A MIS COMPAÑEROS ANARQUISTAS DEL SINDICATO ATEMad

CARTA DE DIMISION

Aunque en el fondo creo que mi posición en el sindicato queda clara con mi no asistencia a las reuniones, y como no me apetece tampoco pasar el mal rato de ir dando explicaciones o de enfrentarme a réplicas, que sinceramente no tengo ninguna gana de contestar, expongo aquí las razones por las que dejo esto.

Si hago autocritica he de decir que tampoco creo que haya puesto toda la carne en el asador, y es que me da miedo todo aquello en lo que tengas que contar con el resto de la gente, mi carácter individualista y tener tan claro que las soluciones a nuestra situación no pasan tanto por intentar negociar con unos estafadores que se aprovechan de nosotros como por que nos unamos, hagamos piña y boicoteemos o seamos un simple grupo de presión sin más pretensiones que llevarnos mal con las empresas, he de decir que siempre tuve la esperanza de no ir solo contra todo esto, y es por eso por lo que pese a mi pesimismo con respecto al resto de la gente intente estar aquí.

Ahora vienen las verdaderas causas por las que yo abandono, y es que me encuentro muy desmotivado, creo que el sindicato está perdido y deambula sin rumbo, creo que los que toman el liderazgo no tienen nada que aportar, ya exprese en algún ocasión que lo veo demasiado politizado, pero hoy me he dado cuenta de que todo es una pose. Ayer me lleve otra de esas sorpresas que te hacen desconfiar de todo, y es que por lo menos espero que en el que creía mi sindicato, tan integro y con ganas de cambiarlo todo, no se empleara la crisis como excusa para traicionarme (me siento así) y mucho menos que los traidores sean los autodenominados "la cúpula" y que creo que tanto daño está haciendo, y que considero culpables de la falta de rumbo, ya exprese que no se me hacia ni puto caso en alguna ocasión, por no hablar de las cosas que no se debaten en asamblea o de las dinámicas de grupo, más interesado que nadie en que esto avance, he intentado motivarme con mil gilipolleces engañándome a mí mismo, mi primer gran varapalo fue el día que no fui a Bilbao a las jornadas y en las que mi sindicato no dijo nada, que lastima de rabia desaprovechada, también estoy bastante en contra de el vacio de ATEMad en internet, que creo que se produce para no hacer sombra a palmadores, pero a la vez me leo palmadores y sinceramente no veo un enfoque demasiado sindical en esa página.

Yo también he pasado hambre este año, también estoy en la cuerda floja, pero si un amigo tiene problemas con una empresa y se de sobra que se comete una injusticia con él, creerme que no seré yo el que les sustituya, y si además mis ex compañeros dicen todos a una, yo soy tan gilipollas de ir a una, si los que intentan hacer esas asambleas tan integras en momentos de crisis se saltan la integridad y anteponen la crisis, pues este no es mi sindicato y desde luego no seré yo el que os entorpezca con mi desgana, mi asco hacia mis compañeros de profesión y la sensación de que la ética en tiempos de crisis es algo secundario, otra opción es suspender el sindicato hasta el 2011 una vez acabada la crisis. Por eso considero que este sindicato no me sirve a mí para nada, y como yo si tengo un motivo nada altruista pues lo dejo y punto. Estoy igual de solo que cuando empecé, pero eso sí bastante más resabiado y muy cabreado con los que consideraba los mis compañeros en esta aventura. Y desde luego se que apoyar a un compañero no es darle palmaditas en la espalda o solidarizarme con él.

Y no es necesario leerse a Chomsky ni a bakunin ni a Marx para tener bien clarito lo que está bien y lo que está mal dentro de una ética, y si dentro del seno de nuestra asociación nos pisamos y no pasa nada pues creo directamente que sobro, la verdad es que si me hubiera callado y hubiera tragado todo lo que me hicieron ahora en tiempos de crisis tendría un par de compañías más.

Podemos criticar a ATAE porque no son anarquistas pero al menos consiguen descuentos en la leatherman y desde luego consiguen sus objetivos, aunque su objetivo sea una mierda. Nosotros no tenemos nada que ofrecer, ni siquiera unidad o integridad, y sin subvención yo no me veo capaz de engañar a nadie diciéndole que se afilie, ni invitando a una fiesta para recaudar y darnos a conocer en la que los grupos que actúan son la filarmónica para perro y flauta y un par de grupos de rock radical, es más me parece absurdo que en este sindicato no se pueda llevar como indumentaria un polo y unas gafas de pasta.

Sin más que os vaya bien, supongo que en esta carta hay parte de cabreo y parte de desesperación, ya os he dicho que a mí también me escasea e trabajo, si me he pasado en algo me perdonáis, si os apetece claro.